El cargadero de la compañía minera Franco-Belga, otrora signo del empuje empresarial de toda esta comarca, se ha convertido en monumento a este pasado industrial.
Aparte de su uso didáctico, el edificio sirve ahora como extraordinario mirador desde el que contemplar una soberbia vista de la Ría.
Bajo él, un nuevo paseo nos lleva hasta la rehabilitada Dársena de Portu.
Cómo llegar