Cancionero Barakaldés
Este libro está compuesto por canciones diversas, de procedencias dispares. Aquí podemos encontrar canciones de diverso tipo y de épocas diferentes, algunas consideradas propias de Barakaldo y otras populares en el resto de Euskal Herria y que nacieron en lugares muy alejados de este municipio.
Lo que define a este cancionero es la heterogeneidad, aspecto que no es más que un reflejo de su autor, Txeru García Izagirre, quien, como otros miles de vecinos de la Margen Izquierda, se sitúa en medio del cambio social que comenzó a mediados del siglo XIX y que nos ha llevado a la sociedad actual.
Esta selección de canciones también está inevitablemente impregnada del recorrido personal de Txeru, un hombre políticamente comprometido, cuya vida laboral ha transcurrido en las industrias e instituciones de la Margen Izquierda y cuyo compromiso con la recuperación del euskera ha sido siempre indudable.
Todo esto es lo que ha acabado por trasladar a este cancionero, un conjunto de melodías que él mismo ha cantado, ha oído cantar o bien ha sido informado -generalmente por gente mayor- de que se han llegado a interpretar. Es, por lo tanto, una versión personal del mundo musical barakaldés representa parte de una época y de un modo de ver la vida.
La extensión digital de este Cancionero Barakaldés tiene el objetivo de ir creciendo con todas las aportaciones que los barakaldeses y las barakaldesas quieran hacer.
Si tienes algo que añadir al texto escrito hasta ahora, envíanos la información a ezagutubarakaldocihma@barakaldo.eus
Nuevas aportaciones
El Danzón (canción cubana)
Cuando el danzón se baila en Cuba,
lo bailan hasta los chiquillos,
a la tierra le entran temblores,
y se mueven hasta los ladrillos.
Danzonzito cubano,
de ritmo embriagador,
cuando más suena el viento,
el movimiento sale mejor.
Se baila en Cuba y en el Japón,
en Barakaldo no deja D. Simón,
porque Llaneza ha puesto un Bando,
ante todo, la moralidad.
En la posguerra había dos personas con mucho poder. Uno era D. Simón, párroco de San José y el otro José María Llaneza, el alcalde, que multaba a los hombres si iban en mangas de camisa y a las mujeres que no llevaran medias, porque era «indecoroso» salir así a la calle. En este caso se contaba un «chascarrillo» (que parece poco creíble): se dice que multó a su mujer porque salió a la fuente pública, a por agua, en época de restricciones, sin medias (hubo muchos años que se formaban «colas» interminables ya que el agua no llegaba a las viviendas, particularmente a los pisos altos).
Aportación de Roberto Montalbán de Lutxana.
Coplas a Santa Águeda
Santa, Santagadea,
una txikita siempre se da. (txikita>perra chica=5 céntimos)
La mujer de esta casa
es una santa mujer,
pero, más santa sería
si nos diera de comer.
Oída hace muchos años a la madre de un amigo de la infancia, nacida en Basatxu. Hablaba con la “s”, y cree que sabía euskera.
Aportación de Mikel Martínez Vitores de San Bizente.
Sendeja Club
El Barakaldo C.F., desde su fundación en 1917 nunca ha estado huérfano de dedicaciones musicales. En el Libro del 75 Aniversario, su autor Carlos Ibáñez menciona cuatro himnos históricos: Un pasodoble en el año 1918, un popurri en 1922, un pasodoble en 1924, obra de Tomás Crespo y un anónimo en 1927, todos ellos de carácter popular y actualmente desconocidos para la mayoría de la afición.
Es a partir de 1957, cuando se fragua una canción que cala en los seguidores baracaldeses y es asumida oficiosamente como himno; ello se produce con ocasión del descenso a Tercera División y los entonces dirigentes promueven una campaña para levantar el ánimo a la afición y evitar que decaiga su apoyo. Una las actuaciones de dicha iniciativa fue la de “bombardear” el pueblo mediante el callejeo constante de un coche dotado de megafonía emitiendo alternativamente mensajes al respecto y el popular pasacalles del maestro D. Borea, “Sendeja Club”, a cuya melodía se adaptó el siguiente texto:
Los chicos del Barakaldo han comprado un pelotón
y bajan a Lasesarre para jugar al fútbol.
Al terminar el partido todos cantan en unión
Alirón, alirón, Barakaldo campeón.
Es Baracaldo sin dudar
cuna del fútbol nacional
Barakaldo, Barakaldo,
Es un equipo sin igual
que siempre sale a ganar
Barakaldo, Barakaldo,
A Segunda División.
Aportación de Jaime Cortázar.